Page 64 - Argentime 113
P. 64

La alimentación saludable es un hábito que se ha tornado cada vez más importante para la po- blación mundial. La evidente y reciente evolución en la forma en que comemos obliga a con- sumidores y productores a repensar sus productos con el fin de nutrirse en forma correcta y preservar el medio ambiente. Entre las distintas prácticas que se sujetan a estas necesidades, comenzó a popularizarse en el mundo la técnica de la liofilización de alimentos. En verdad, los ingredientes liofilizados presentan un universo en sí mismo. Enmarcados dentro de la alimentación saludable e inteligente, y a diferencia de otros procesos similares como la deshidratación, los alimentos no pierden sus propiedades. Y cuentan con una gran ventaja que es su largo tiempo de preservación, algo que los vuelve versátiles para ser utilizados con distintas aplicaciones y fines. Pero vayamos a la primera gran pregunta: ¿qué es la liofilización? Los antecedentes más antiguos refie- ren a la cultura Inca, que aplicaba los principios utilizados en la liofilización para conservar sus alimen- tos. En las alturas de la cordillera los Andes, cultivos cosechados y almacenados, se congelaban por las bajas temperaturas nocturnas y la baja presión del aire, eliminaba lentamente el agua. En la actualidad, el proceso se realiza en liofilizadores de gran tamaño y prácticamente no afecta nu- trientes volátiles o termosensibles, lo que permite conservar el valor nutricional del producto original y tener una vida útil mucho más prolongada. Consiste en congelar el agua del producto para que luego el hielo formado se sublime -proceso median- te el cual un sólido se convierte en gas sin pasar por el estado líquido-, aplicando calor en condiciones de vacío (baja presión). A través de este proceso, el alimento puede perder hasta el 99,5% de su contenido de agua. La elimina- ción del agua hace que los alimentos liofilizados puedan conservar sus cualidades por larguísimos pe- ríodos y también así disminuir su peso. De esta manera reduce drásticamente su costo de transporte y los hace especialmente aptos para el almacenamiento a largo plazo como suministros de emergencia. La otra gran pregunta es: ¿qué alimentos se pueden liofilizar? Y la respuesta es sencilla: todos. Frutas y verduras pueden aparecer como la primera opción, dada su facilidad de consumo. ¿QUÉ ES LA LIOFILIZACIÓN? CONSISTE EN CONGELAR EL AGUA DEL PRODUCTO PARA QUE LUEGO EL HIELO FORMADO SE SUBLIME APLICANDO CALOR EN CONDICIONES DE VACÍO. EL PROCESO NO AFECTA NUTRIENTES VOLÁTILES O TERMOSENSIBLES, LO QUE PERMITE CONSERVAR EL VALOR NUTRICIONAL DEL PRODUCTO ORIGINAL Y TENER UNA VIDA ÚTIL MUCHO MÁS PROLONGADA. 


































































































   62   63   64   65   66