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En 2006, año en el que ingresó Juan Martín Nero en reemplazo de Matías Mac Donough, tanto Gonzalo como Facundo ya eran 10 de hándicap. Con esta formación llegó un nuevo título en Palermo en 2008, tras diez largos años de espera, y otro en 2010, siempre ante La Dol na en la nal. El equipo, ahora de 40 goles de hándicap, había encontrado su cuarteto ideal. Pero Nero y Mac Donough partieron al año siguiente, y nada menos que hacia La Dol na, equipo que ahora pasaría a ser conformado por cuatro ex Ellerstina. Fiel a su estilo, los Pieres buscaron rearmarse en familia. Así fue que ingresó el tercero de los hermanos, Nicolás, y también un viejo conocido: su cuñado, un histórico del polo como Mariano Ague- rre. Con este cuarteto llegó un nuevo campeonato en Palermo, tras derrotar en la nal, por supuesto, a La Dol na de Cambiaso. Y en 2015 haría su entrada otro Pieres. Este no era hermano, y si bien el apellido era el mismo, traía consigo una cuota de desfachatez, dentro y fuera de la cancha, que renovó las ener- gías de Ellerstina. Proveniente de Alegría, con 10 de hándicap, se incorporó Pablo Pieres, Polito para to- dos, primo de Gonzalo, Facundo y Nicolás. El ingreso de Polito como delantero hizo retrasar a Facundo, punta de lanza histórica de este equipo, que ahora se posicionaba como back. Así, el sueño deportivo de Gonzalo parecía hecho realidad: cuatro Pieres vistiendo la mítica camiseta negra de la Zeta.
Al día de hoy, Ellerstina mantiene esta formación, que alcanzó momentáneamente los 40 goles en 2018. Hay algo claro: todos ellos son cracks de este deporte, capaces de hacer lo que haga falta a la perfec- ción.